La copperplate es un tipo de letra adecuado para desarrollar un ductus preciso y ágil, sin embargo, cuando se va a realizar una formación más precisa y especializada, se requiere previamente haber realizado tareas en las cuales se utilicen diversas herramientas. Un manera de iniciar puede ser comenzar con la letras itálicas, pinceles y cañas. Los ejercicios de la copperplate son muy canónicos, es decir formales, pero están orientados a lograr un trazo ágil. Una estrategia más moderna, es partir de las estructuras básicas, es decir de las configuraciones y elementos de las letras, que hacen posible construir nuevas letras.
La enseñanza es una actividad analítica, pero ademas se propone desarrollar habilidades y competencias. Es muy común que los aprendices consideren que la habilidades caligráficas se forman sin mayor ejercicio, no obstante, la repetición de un gesto gráfico se propone fijar, construir un sistema funcional neurologico que sólo se forma por la ejercitación continua.
Una herramienta invaluable es construir una bitacora. En este caso se ha utilizado cuadernos cuadriculados, los cuales permiten trabajar la inclinación, las proporciones de manera exacta. Como herramienta se utilizan micropuntas, que son de uso común en la escritura de los estudiantes.